Cosas que no son tendencias
Los buenos tiempos
Dicen que una canción puede ser un puente, mamá. Pero yo digo que es también el suelo que pisamos. Y puede que cantemos para tenernos en pie y no caernos. Puede que cantemos para seguir siendo nosotros mismos.
—En la Tierra somos fugazmente grandiosos, Ocean Vuong
Hay una canción que hace parte del suelo que piso: Los buenos tiempos, de Carlos Vives. Tengo fe (1997), el álbum al que pertenece, es mi favorito de toda su discografía. Además de los recuerdos especiales que me trae, me parece tan costumbrista (si cabe el término), tan edificante de la identidad nacional, tan Gabriel García Márquez. Creo que contiene lo bonito y lo feo de la colombianidad, a caballo entre la tenacidad que ha soportado un siglo de violencia continua y el dolor que resignifica el hogar cada vez que es necesario.
Pa'mi abuelo fue el progreso
Y eso lo tenía contento
Viviendo las malas horas
Lo llamó los buenos tiempos
¿Qué canciones hacen parte del suelo que pisan? Yo también me voy a responder esa pregunta y voy a crear una nueva lista de reproducción que me recuerde, puntualmente, todas las formas en que la música me ha mantenido en pie.
(De ese álbum de Carlos Vives, en segundo lugar, me gusta Interior. De terceras, Tengo fe).
—¿De qué escribes?
—De cosas que no son tendencias.
Cajones inteligibles
En un taller me pusieron a pensar en los autores que disparan mi propia escritura. Había pensado en los que me hacen amar la vida, en los que me han hecho partícipe del horror global, en los que cimientan mi cosmovisión, en los que me han construido como mujer y en los que han reescrito mi subjetividad, pero no en los que activan mi propia pluma. Pasé días pensando y llegué a la siguiente lista, imperfecta y aún en construcción:
- Margarita García Robayo
- Jazmina Barrera
- Alejandro Zambra
- Ricardo Silva Romero
- Juan Gabriel Vásquez
- Gabriela Wiener
- María José Navia
- Leila Guerriero
- Andrés Felipe Solano
No sé si esos autores disparan mi escritura propiamente, pero al menos me hacen sentir que las narraciones ponen la condición humana en cajones inteligibles. Cada vez que los leo, quiero abrir mis propios cajones.
¿Qué autores disparan su escritura? Yo me voy a seguir respondiendo esa pregunta el tiempo que me dure el título de Lectora.
Novedades
El próximo mes haré un Taller de Escritura Creativa. Les anticipo las fechas y los detalles para que vayan revisando sus agendas. Ojalá se puedan sumar. Es un espacio único del que saldrán con herramientas narrativas, retazos de más de diez historias y el impulso de hacer de la escritura una práctica cotidiana. Es para ustedes si quieren soltar la pluma, aterrizar un proyecto de escritura o ambas cosas.
Fechas: sábados 18 y 25 de noviembre (ambas jornadas)
Horario: 9am-12pm hora de Colombia
Modalidad: virtual
Incluye: 6 horas sincrónicas, material digital con la síntesis del contenido, libreta, lápiz y set de stickers (envíos solo para Colombia).
Precio: COP $170.000 o USD $40 (participantes fuera de Colombia)
Inscripciones e inquietudes: letraylibros@paola-mendez.com
¡Nos vemos en el taller!
Leo
Terminé Pura pasión, de Annie Ernaux.
Estoy por terminar En la Tierra somos fugazmente grandiosos, de Ocean Vuong.
[De ese libro les traigo una cita maravillosa]
¿Te acuerdas del día más feliz de tu vida? ¿Y qué dirías del más triste? ¿Te preguntas alguna vez si la tristeza y la felicidad pueden combinarse, a fin de componer un hondo sentimiento purpúreo que no sea bueno ni malo sino insólito, sencillamente porque no tendrías que vivir en un lado o en el otro?
Empezaré No es un río, de Selva Almada.
Veo
Estoy en temporada de documentales. Vi Live to 100: Secrets of the Blue Zones (Vivir 100 años: los secretos de las Zonas Azules). Está en Netflix. Es una investigación por las Zonas Azules del mundo (aquellas en las que más centenarios hay), que trata de descifrar los factores que han favorecido la longevidad. Me encantó, quiero escribir un ensayo al respecto.
Escribo
Aquí encuentran mi más reciente entrada de blog en el diario El Tiempo: palabras sobre el libro Pura pasión, de Annie Ernaux.
Gracias por ser parte de este camino. Sigo tomando apuntes.
Un abrazo.